Carpooling, versión larga distancia
Compartir el auto con desconocidos no es sólo una buena manera de dividir gastos a la hora de ir a la oficina, sino también de ahorrar en viajes largos
9 de noviembre de 2014
No es una novedad, pero sí una tendencia que crece: compartir el auto para ahorrar costos. Y de paso conocer gente, reducir el impacto ambiental y aliviar la congestión vehicular.
El sistema de carpooling, que permite contactar a conductores y pasajeros que viajan hacia un mismo destino, arrancó hace pocos años en el país y rápidamente fue en alza, casi tanto como el aumento de la nafta, los peajes y los estacionamientos. Encamello.com, VayamosJuntos.com.ar, Sincropool.com, CompartoCoche.com.ar, Coviajero.com.ar, Hagamospool.com., son algunas de las plataformas surgidas en los últimos cinco años en la Argentina.
Pero si, hasta hace poco, la mayoría de las ofertas se limitaba a los viajes de ida y vuelta a la oficina, comienzan a surgir nuevas plataformas cuyo foco son los trayectos de larga distancia.
El sitio de capitales alemanes Tripda (www.tripda.com.ar), por ejemplo, acaba de desembarcar en la Argentina y Uruguay, pocos meses después de lanzarse en México, Chile, Brasil (donde tiene su casa matriz) y Colombia, con este objetivo.
"Nuestra idea es que los usuarios conozcan el producto, tal vez con viajes cortos al principio, para usarlo después en vacaciones y en recorridos más largos", comenta Magdalena Szuszkiewicz, polaca y Founder & Managing Director para la Argentina y Uruguay.
Algunos de los viajes sugeridos son Buenos Aires-Córdoba, Buenos Aires-Mar del Plata, Córdoba-Rosario, e incluso los más internacionales Mendoza-Santiago de Chile, o Buenos Aires-Uruguay.
El contacto se produce a través de Facebook (de esta manera los usuarios ya saben con quién están viajando), donde conductores y pasajeros publican los trayectos que necesitan recorrer, con fechas, horarios, asientos disponibles y precios sugeridos de gastos (el sistema calcula el precio basado en el kilometraje y el costo de la nafta. "Para nosotros es importante que la gente no gane plata con esto", aclara Szuszkiewicz). El usuario también puede agregar sus preferencias, de modo que los demás sepan lo que pueden esperar de viajar en su compañía (qué tipo de música escucha, si se pueden llevar mascotas o comer en el auto, entre otras cosas).
"Hola, viajo desde La Plata después de hacer sonido a una banda el viernes a la noche rumbo a Necochea para ir a ver a mi novia; quien quiera sumarse compartimos gastos en partes iguales... Sale música, mate y buena onda", reza uno de los avisos de un tal Martín R.
No hay apellidos, sólo la primera letra del mismo. En el país, la seguridad es la principal traba para que el carpooling termine de imponerse como en Europa, donde el sistema suma 20 millones de usuarios. Tan instalada está esta práctica, que hasta ha generado huelgas de taxistas y protestas de sectores del transporte tradicional, como ocurrió este año en España.
En la mayoría de las plataformas de carpooling, los usuarios suelen validar su email y celular por un tema de seguridad. También, el puntaje y las referencias después de un viaje determinan cuán confiable, o agradable, es cada persona.
Por otro lado, el usuario tiene siempre la libertad para decidir con quién viaja. Los pasajeros entran en contacto directamente con los conductores que elijan y éstos pueden aceptar o rechazar las propuestas.
Y si el usuario es mujer y prefiere no viajar con hombres, Tripda agregó la opción Sólo para ellas, donde tanto conductor como pasajero son mujeres.
Por último, Szuszkiewicz destaca que el servicio es totalmente gratuito, a diferencia de otras plataformas que cobran un fee mensual a las compañías (no son pocas las empresas que brindan el servicio de carpooling como un beneficio para sus empleados).
"De acá a dos años no vamos a cobrar nada. Después, el modelo de negocio va a depender del mercado. Podremos facturar por publicidad, consultoría, venta de seguros, ya veremos -se ataja Szuszkiewicz-. Lo importante, por ahora, es que nos conozcan." Hasta el momento no les ha ido mal: en tres semanas sumó 6000 usuarios sólo en la Argentina.