Cinco lugares para adictos a Downtown Abbey
Los cinco grandes
20 de marzo de 2016
1- Castillo de Highclere
La gran locación
La televisión británica tiene una larga tradición en materia de costume drama, empezando por Upstairs, Downstairs (1972), que contaba la historia de la aristocrática familia Bellamy en las primeras décadas del siglo XX. Y tiene muchos otros puntos en común con Downtown Abbey. Pero lo cierto es que el drama histórico sobre el siglo XX filmado en el XXI logró un éxito absoluto de ambas orillas del Atlántico: en consecuencia, los turistas empezaron a desembarcar en busca del circuito Downtown Abbey en Gran Bretaña. Y el punto principal de este tour –que existe en todos los modos posibles, incluyendo uno individual y personalizado- es el Highclere Castle, cuyos cientos de años de historia no le impidieron convertirse en la principal locación de la serie. Sobre una estructura georgiana, la mansión fue diseñada por Sir Charles Barry con una fachada que el habitué del programa reconocerá de inmediato. Es propiedad de los condes de Carnavon, que lo habitan desde 1676: la misma familia del lord que descubrió, junto a Howard Carter, la tumba de Tutankamón.
"¡Qué escénico!", dijo el premier británico Benjamin Disraeli en los tiempos de la reina Victoria, cuando conoció Highclere. Aquí se puede ver la biblioteca de lord Grantham, el salón donde la familia toma el té y la pintura original de Van Dyck del rey Carlos I en el comedor. Se visita durante el verano europeo.
2- Bampton
Un pueblo muy inglés
Este pueblo del condado de Oxfordshire tiene su alter ego televisivo en Downton Village, por donde se suele ver pasear a personajes como Tom, Mrs. Patmore o Mr. Bates. Se trata de una localidad realmente antigua, cuyos orígenes se remontan a la Edad de Hierro: un poco más modernamente, lo que se puede ver durante el paseo actual que prevén todos los tours por el condado son algunas construcciones de piedra y viviendas que datan del siglo XII. Entre todas se destacan la iglesia de St. Mary, impulsada a la fama televisiva por el relato de Julian Fellowes: y probablemente también se la apreciará en un futuro próximo en la pantalla grande, considerando que la serie está por ser llevada al cine. Se visitan también los lugares que funcionan como escenario del hospital de Downtown, el pub del pueblo y la antigua casa de Matthew Crawley.
3- Angels Fancy Dress
El vestuario es todo
Downton Abbey, ni ninguna otra serie semejante, sería lo que es sin el vestuario. Desde los rígidos vestidos de Maggie Smith en su papel de la condesa viuda hasta las lánguidos trajes de noche de lady Mary, la serie ofrece un impresionante despligue en la materia, que refleja el paso de tiempo entre el comienzo de la historia –en 1912, año del hundimiento del Titanic- y el final, a mediados de los años 20. Quien quiera saber cómo se siente calzando uno de estos vestidos, puede ir en Londres hasta el local de Angels Fancy Dress, que proporciona mucho del vestuario y los accesorios de la serie (y de muchos otros programas y películas, no necesariamente de época). En su web, la sastrería evoca que los cambios en la vestimenta reflejan otros de la sociedad –como el emponderamiento de las mujeres y el ascenso de la clase media- y recomienda cómo lograr un look Downton con la ropa, el peinado y el maquillaje.
4- London mix...
Estaciones, restaurantes y más
De vez en cuando los personajes se permiten salir de las aristocráticas paredes de Highclere para incursionar en las maravillas y peligros de Londres. Algunos de los lugares de la capital británica que aparecen son el palacio de Buckingham (en realidad ubicado en la cercana Lancaster House), para la presentación de lady Rose en el especial navideño de 2013; la estación de King’s Cross (filmada en los alrededores de St. Pancras) para el encuentro de lady Edith con Michael Gregson; el Criterion Restaurant (en la foto; donde Michael le cuenta su intención de divorciarse de su esposa); en la quinta temporada los históricos restaurantes Rules –de 1798, considerado el más antiguo de la ciudad- y Simpson’s-in-the-Strand, fundado en 1928, que tuvo entre sus clientes –no ficticios- a Dickens, Bernard Shaw, Conan Doyle y Benjamin Disraeli (y a Sherlock Holmes entre los ficticios, además de los Crawley). Y por supuesto, los fanáticos de lord Grantham pueden fotografiarse con la figura del actor que lo encarna, Hugh Bonneville, en el Museo de Cera de Mme. Tussaud.
5- Museos
En tiempos de guerra
Las primeras temporadas de la serie reflejaron la crudeza de la vida en el frente durante la Primera Guerra Mundial, sobre todo a través de los personajes de Matthew y Thomas. Se puede conocer más sobre aquel episodio de hace un siglo, que marcó para siempre la historia del siglo XX en Europa, visitando el museo First World War Galleries (cerca de las estaciones de metro londinenses Lambeth North y Waterloo). La muestra ofrece una inmersión conmovedora en los tiempos del estallido de la guerra, recreando una trinchera y los distintos frentes desde Medio Oriente hasta Africa, pero también evoca el impacto en la vida cotidiana en Gran Bretaña y su antiguo imperio. En Downton Abbey la guerra también impacta en la vida de lady Sibyl, que se reconvirtió en enfermera asistiendo a los heridos y moribundos en la mansión familiar, convertida en hospital. El Florence Nightingale Museum, sobre la orilla sur del Támesis, permite echar luz sobre esa vocación y sobre la vida de la célebre pionera inglesa.