Salsipuedes, para turistas todo terreno

Con cabecera en la ciudad de Río Ceballos Ña 16 km del aeropuerto internacional y a unos 30 km de la capitalÑ, a la que se accede por la ancha ruta E-53, la zona muestra una amplia propuesta para el turismo alternativo.

Mediante la ruta pavimentada, el visitante tiene la posibilidad de recorrer (o detenerse en las hosterías, restourantes y confiterías) las localidades de Salsipuedes, Agua de Oro, La Granja y Ascochinga. Al llegar a esta última, el viajero puede continuar hacia el Oeste para arribar a Jesús María, o en su defecto tomar para el Este con destino final en La Cumbre, en el Valle de Punilla. "Este es un camino muy lindo que cruza el cordón montañoso y desciende hacia La Cumbre, a través de 42 km", destacó Rubén Salguero, secretario de Turismo de la Municipalidad de Río Ceballos, una ciudad de 20 mil personas.

Quienes no deseen alejarse mucho de la zona pueden internarse por los caminos secundarios a la ruta principal para acceder a apasionantes paisajes dibujados por las sierras, ríos, cascadas y una variada vegetación.

"Esta zona es apta, además del turismo convencional, para el turismo alternativo, como caminatas guiadas, trekking, cabalgatas y mountain bike. Se puede disfrutar de los ríos y de la abundante flora y fauna autóctonas", señaló Salguero.

En Río Ceballos, una cita obligada para visitar es el cerro Ñu Porá, de unos 600 metros de altura, en cuya cima se encuentra enclavado el Cristo Redentor. Se accede a pie o en vehículo.

Tampoco puede obviarse el espejo de agua formado por el dique La Quebrada ni la reserva que lo rodea. Este embalse es uno de los pocos donde existe una celosa preservación ecológica del agua, ya que está prohibido el uso de embarcaciones con motor.

La zona urbana de Río Ceballos tiene una capacidad de alojamiento para 2500 personas entre hoteles, hosterías y bungalows, además de los campings. Y por tratarse de una ciudad, con su consecuente desarrollo, cuenta con una fluida actividad comercial, servicios generales de comunicaciones y transportes, una decena de establecimientos gastronómicos de categoría y lugares de diversión, como confiterías bailables y el casino.

Dentro del corredor de las sierras chicas, Salsipuedes es una de las localidades que ha puesto el acento en la captación del turismo mediante el aprovechamiento de la naturaleza. Está a 5 km de Río Ceballos y tiene una capacidad para 700 huéspedes.

Entre las actividades programadas para las vacaciones de invierno, el próximo domingo se realizará la cuarta fecha del campeonato de motocross.

Cómo llegar: desde la ciudad de Córdoba o desde el aeropuerto internacional se debe transitar por la ruta provincial E-53, que comunica todas las localidades turisticas del corredor de las sierras chicas.

Alojamiento: en Río Ceballos se encuentran hoteles de hasta dos estrellas (10-15 pesos por persona) y, como en las otras poblaciones vecinas, hosterías (8 pesos), cabañas (50 pesos por día para 4 personas) y campings (2-4 pesos).

Más información: Secretaría Municipal de Turismo de Río Ceballos, (03543) 45-3355. En Salsipuedes, oficina de turismo en la ruta E-53, (03543) 49-2900, y en la Terminal de Omnibus (03543) 49-2880.

Con mucha historia y espíritu religioso, son para caminantes pensativos

La paz y tranquilidad que brinda el potencial de las sierras chicas tiene dos puntos preferenciales para los visitantes: Candonga y Ascochinga.

Para acceder a Candonga se debe transitar, desde la ruta E-53 a la altura de El Manzano, por un camino sinuoso.

Al final del recorrido de unos 10 kilómetros se encuentra la capilla de Candonga, un monumento histórico cuya construcción colonial se realizó entre 1720 y 1762 y formó parte de la estancia Santa Gertrudis.

Su techo tiene forma de bóveda, y sobre él se levanta una pequeña cúpula. A su costado está el campanario. La sacristía también cuenta con techo abovedado. Además de la capilla, puede visitarse el molino restaurado.

Alejándose un poco de la historia, enfrente se encuentra la Casa Grande de la Estancia de Candonga, un centro recreativo que ofrece comidas, espectáculos musicales y entretenimientos.

A 58 km de Córdoba, por la ruta E-53 se ubica Ascochinga, un pequeño paraje rodeado de verde, como el campo de golf que lo distingue. Lo primero que observa el visitante es la torre de piedra de la iglesia del Sagrado Corazón, signo distintivo de Ascochinga.

Y a un costado del templo se halla un centro recreativo y comercial desde donde los visitantes parten para realizar recorridos guiados de trekking o mountain bike. Al regreso del paseo, en el centro comercial se puede disfrutar de un almuerzo reparador.

Los promotores de turismo en la zona invitan a disfrutar de "la flora, los pájaros y el silencio. Caminar por aquí no se puede comparar con nada".