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El cansancio de fin de año impacta en nuestro deseo sexual

En medio de lo que los especialistas llamaron 'efecto diciembre', ¿qué rol juega el deseo sexual? Hablamos sobre el impacto del estrés, del agotamiento y te compartimos consejos para volver a encenderte.


El impacto del estrés y el cansancio durante diciembre.

El impacto del estrés y el cansancio durante diciembre. - Créditos: Getty



Diciembre, el último tramo del año, nos sumerge en una vorágine de eventos, encuentros, preparativos y reflexiones. Todas esas cosas que se suman a nuestra rutina de siempre: el trabajo, la casa, los hijos, mascotas, gimnasio, supermercado. Todo esto quieren decir que diciembre trae consigo un cansancio palpable que puede afectar, entre otras cosas, el deseo sexual. Porque claro, ademas de todo esto, mantener una vida sexual activa, requiere de tiempo, espacio y atencion. La acumulación de tareas, eventos sociales y la presión por cerrar el año pueden generar un estrés abrumador. Este estrés, como han revelado estudios, es un inhibidor directo del deseo sexual. La conexión entre el estrés y la falta de deseo es compleja y si a esto le sumamos la falta de comunicación, es un combo que ya sabemos, ¡hace estragos! 

Algunas de las excusas más comunes

En el imaginario popular, el cansancio se ha convertido en una excusa frecuente para evitar encuentros sexuales. Pero, ¿cuántas veces es esta una verdadera razón y cuántas una forma de eludir el tema? Es importante que podamos distinguir entre la fatiga física, mental, agotamiento, o el estrés crónico. Y ojo, que esto puede solapar una falta de deseo puntual con nuestra pareja que no estamos queriendo ver.

Cansancio Mental vs. Cansancio Físico:

El cansancio puede afectar el deseo sexual. Mientras el agotamiento físico puede no ser un factor determinante, el cansancio mental puede afectar la fase del deseo, las 'ganas de'. Es crucial entender estas diferencias para abordar la falta de deseo de manera efectiva.

Cómo Recuperar el Deseo:

1. Energía: plantearnos que si siempre hacemos lo mismo y nos encontramos con la misma gente y tenemos las mismas rutinas, es muy difícil que nazca el desaseo. NO hay espacio ni tiempo para la conexión.  La idea es encontrarnos con nuestra pareja, poner energía el cambio para encontrar momentos de intimidad, diálogo, disfrute y encuentro.

2. Comunicación en pareja: el deseo no es algo natural, sino que debe trabajarse en la pareja. La comunicación abierta sobre expectativas, deseos y límites es fundamental.¡Ojo! con la obligación de pasar las fiestas presionada con ir a una u otra casa de algún familiar que no nos sentimos cómodas, porque eso suma mucha distancia “fuera y dentro” de la cama.

3. Evaluar cómo se está afuera de la cama. Comunicarnos para poder sacar para afuera eso que no nos gusta o no nos hace bien. Fomentar emociones que nos acerquen y hablar las que nos están tirando para abajo 

4. Gestión del estrés: sabiendo que el estrés es un gran inhibidor del deseo, buscar formas de gestionarlo se vuelve vital. Pequeñas pausas, técnicas de relajación y delegar responsabilidades pueden marcar la diferencia. Buscar actividades para compartir. Apagar los celulares.

5. Incorporar elementos nuevos: introducir cambios en la vida sexual puede revitalizar el deseo. Desde nuevas fantasías, juegos eroticos, compartir comidas a solas, fomentar comunicación durante el día antes del encuentro,  hasta incorporar juguetes sexuales, disfrace, juegos de rol y explorar juntos para fortalecer la conexión íntima.

6. Autocuidado: trata de estar más organizada, comer bien, hacer ejercicio, y respetar las horas de descanso. Mejorar nuestro ánimo individual y que estemos con más energía para el  placer. Pero por sobre todo, ¡no te exijas por demás! Haces lo que podes. Así que no te pongas metas imposibles porque de ahí a la frustración, hay un solo paso.

Conclusión: diciembre, con su sobrecarga de actividades y reflexiones, puede afectar nuestro deseo sexual. Lo importante es que puedas reconocer las razones detrás de esa falta, que puedas comunicarlo abiertamente y busques maneras de pasarla mejor. No nos olvidemos de algo re importante. Disfrutemos de este mes, porque con toda su carga, no deja de ser un mes lindo, de calorcito, de abrazar a los que queremos, de mandar y recibir mensajes amorosos, de festejar, de agasajar a los que queremos o de ser agasajadas. El amor y el deseo también se encuentran en esas cosas.  Que tengas un hermoso último tramo del 2023. Y un comienzo lleno de mimos y con energía muy positiva.

 

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