5 formas en las que el yoga puede mejorar tu vida sexual

Contracción de los músculos pubocoxígeo. Aunque a veces no resulte obvio, cuando practicas yoga ponés a trabajar todos los músculos de tu cuerpo y -cuando estás realizando posiciones de pie- esto te obliga a soportar el peso de tu propio cuerpo y aumentar la fuerza del músculo del esfínter y el músculo que controla la micción ¿El resultado? Por clase de yoga terminas realizando entre 10 a 40 mintuos de ejercicios de kegal (es decir, de contracción del músculo pubocoxígeo) y ya está comprobado que este tipo de práctica puede darte orgasmos mucho más poderosos.

Estar 100% presente. Parte clave de las clases de yoga, ser consciente de tu cuerpo en cada momento es fundamental ¿Saben cuándo también es importante? Mientras estás teniendo sexo con tu pareja. Y si bien muchas veces esto no es fácil (estás pensando en cómo suenan tus gemidos, cómo se te ve desde determinada perspectiva o... si apagaste el horno), el hacer ese ejercicio durante las clases de yoga te va a ayudar a llevarlo a la intimidad y disfrutar al 100% de lo que está pasando.

Hoy posiciones de yoga, mañana posiciones sexuales. Como ya sabés, no todas las posiciones de yoga son fáciles de sostener. Llevan práctica, resistencia y tienen cierto progreso. Pero una vez aprendidas, son fácilmente trasladables a tu vida sexual y pueden mejorar realmente tus habilidades. Para liberar la tensión en los músculos de la ingle podés sentarse a horcajadas con las piernas abiertas, para aumentar la sangre a sus regiones inferiores, podés adoptar la postura de la cobra. Como ves, las posibilidades son infinitas.

Vas a tener más energía. En un momento de la historia que la privación del sueño es la regla, no es raro escuchar que las personas “prefieren irse a domir antes que tener relaciones”. Pero ojo, hacer yoga regularmente ayuda a tus niveles de energía así como también a dormir mejor por la noche, lo que -claramente- tiene un impacto directo con tu deseo sexual.

Encontrar tu lugar zen. Los problemas nos rodean y la salud mental siempre parece estar parada cerca del precipicio. Algo que está en el total opuesto cuando pensamos en una vida sexual sana, para la cual necesitas tu mente clara. Se demostró el yoga ayuda con todo tipo de problemas mentales y físicos, incluida la presión arterial alta, la ansiedad y la depresión.