Murió Paul Auster: la historia de uno de los escritores norteamericanos más brillantes de su generación

"Siento que mi salud es tan precaria que esto podría ser lo último que escriba", había declarado el autor a fines de 2023, con motivo de la presentación de su libro Baumgartner, el cual se encontraba escribiendo cuando enfermó. La obra, impregnada por el dolor y enfrentando la mortalidad, es hoy el punto final para una carrera prolífica que inició con una serie de experimentales historias de detectives publicadas como La trilogía de Nueva York.

Nació el 3 de febrero de 1947, en Newark, Nueva Jersey. Tras graduarse de la Universidad de Columbia, en 1970 Paul se mudó a Francia, donde se inició tímidamente traduciendo obras de escritores franceses, entre ellos Paul Sartre, al tiempo que publicaba algunos trabajos propios en revistas norteamericanas.

Comenzó escribiendo poesía, su pasión desde que era un niño, siendo La invención de la soledad (1982) la primera prosa de no ficción publicada por el autor. La popularidad le llegó con la mencionada trilogía, especialmente con la primera de las obras que la componen, Ciudad de cristal, sobre un detective privado que vigila a un hombre: se trata de la primera obra de ficción que Auster publicó bajo su nombre, un éxito instantáneo que antes fue rechazado por 17 editoriales y que después hasta tuvo una adaptación en novela gráfica, la cual fue nombrada por The Comics Journal como una de las 100 mejores historietas del siglo XX.

Su carrera abarca más de 30 libros, gracias a los cuales Auster se convirtió en un maestro de la literatura norteamericana, con un relato siempre melancólico y trascendental que podía mezclar tramas adictivas con enfoques existencialistas, explorando de manera súper interesante ideas del "yo", pues se ha presentado a sí mismo en sus obras en diferentes encarnaciones.

"Paul intenta siempre responder por sí mismo preguntas fundamentales sobre el arte de la ficción. ¿Quién es el autor? ¿Qué significa ser un personaje de ficción? ¿Qué es contar historias?", dice sobre la obra la escritora Siri Hustvedt, justamente la esposa de Auster que fue la encargada de dar primero la noticia de la enfermedad de su marido.

Auster ha contado que su vida fue marcada por la muerte desde niño, cuando un rayo mató a un compañero en un campamento, a escasos centímetros de él. Ese suceso traumático impregnó a su obra con la fascinación por los pequeños instantes que cambian la vida, donde habitualmente los personajes modifican sus rumbos debido a circunstancias que los obligan a transformarse. Su novela 4321 (2017) retoma ese hecho que, según relató, nunca pudo superar, empezándola a escribir a los 66 años, el año en que su padre murió de un infarto.

"Tenemos la habilidad de pensar, hacer planes, tener objetivos, y yo siempre estoy interesado en cómo intervienen las cosas inesperadas en nuestro camino y pueden hacer que se caiga nuestro universo", declaró a La Nación cuando lo tuvimos años atrás en el país, al ser invitado de honor a la Feria del Libro.

El drama volvió a golpear su vida a inicios de 2022, cuando Daniel Auster, hijo de Paul fruto de su matrimonio anterior (entre 1974 y 1979) con la famosa escritora Lydia Davis, murió de una sobredosis casi dos semanas después de que lo hiciera su pequeña hija de 10 meses, Ruby, a causa de una "intoxicación aguda por los efectos combinados de fentanilo y heroína", mientras la pequeña estaba bajo el cuidado del joven que tenía un extenso historial con las drogas.

El 11 de marzo de 2023, Siri sorprendió al anunciar otra noticia que sacudió al mundo de la literatura: el cáncer de su esposo. "Vivir con alguien que tiene cáncer y está siendo bombardeado con quimioterapia e inmunoterapia es una aventura de cercanía y separación. Uno tiene que estar lo suficientemente cerca para sentir los tratamientos enervantes casi como si fueran propios y lo suficientemente lejos para ser una ayuda genuina. ¡Demasiada empatía puede volver inútil a una persona! Por supuesto, no siempre es fácil caminar por esta cuerda floja, pero es el verdadero trabajo del amor", expresó en su cuenta de Instagram.

No solo las obras de Auster han sido traducidas a más de 40 idiomas, sino que también recibió toda clase de honores como ser nombrado Caballero de la Orden de las Artes y las Letras de Francia, en 1992, y fue acreedor del Premio Príncipe de Asturias de las Letras, en 2006. También se dio el gusto de probarse en otras de sus pasiones: el cine.

Paul Auster escribió guiones para varias películas como Smoke (Wayne Wang, 1995), que le valió el premio Independent Spirit al mejor primer guion.

En 2020, vimos El país de las últimas cosas, película de Argentina y República Dominicana dirigida por Alejandro Chomski, con libreto escrito en colaboración con Auster.

Un agradecido a la vida, Paul Auster falleció dejando un legado inmenso que trascenderá el tiempo, algo que el autor jamás esperó ni imaginó, según sus propias palabras: "Tuve la suerte de hacer exactamente el trabajo que quería hacer y nunca pensé que fuera posible. Mi ambición era escribir un solo libro lo suficientemente bueno como para publicarlo. Que haya logrado mucho más, me sorprende y asombra".