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"Nervenkitzel"





Para consuelo de los que fueron votados y todavía están dando vueltas con el escrito, yo, autora del blog, con casi 2 años de horas de vuelo, sigo sintiendo las mismas "Nervenkitzel" (en alemán: "cosquillas de nervios")* que al comienzo. Sépanlo.
El momento en que abro la página de Revista Ohlalá son los segundos en los que me abismo al precipicio. Y me pregunto: ¿se habrán enganchado? ¿Les interesará el tema? ¿Les gustará cómo escribo? ¿No estaré demasiado repetitiva? Etcétera.
No voy a mentirles diciéndoles que me ne fregan la cantidad de comentarios que cada post recibe. El número general es, por cuestiones obvias, con lo primero que me topo y un indicio de cómo viene la cosa. Si un post no tiene feedback algo me hace ruido, por muy elegantemente escrito que lo viva. Pero la calidad de los comentarios, el compromiso, la belleza, la simple fuerza positiva que contagian... eso sí marca una diferencia. Y ahí es cuando me siento realizada. Ah, sí, me digo, no hay mejor trabajo que escribir lo que se me canta, lo que siento desde mis entrañas y que eso haga eco, que construya un sentido, un significado, un valor, algo... en el resto.
Tuve varios momentos de crisis y sin embargo nunca jamás llegué a dudar de mi continuidad acá. No sé, ¿será que me siento tan a mis anchas escribiéndoles que me imagino seguir haciéndolo hasta que las velas ardan? Y no es que no proyecte crecimiento laboral, pero perfectamente puedo seguir desarrollando mis otras facetas -el cine y el teatro- y continuar refugiándonos juntitos, sin vueltas, cursis, solemnes, amigos, quesos, en este ámbito (¿no creen?)
Disfruto mucho de leerlos y conocerlos. Me nutro de todos, incluso de los comentarios más críticos. Ya saben: hay algo de la multiplicidad que me fascina, como si sólo pudiera vislumbrar un cachito de verdad en ese vitraux de puntos de vistas.
Y por último: extraño MUCHO a los que se fueron, pero, aún así, (o justamente por ello) celebro a los valientes que, percibiendo que hay un grupo hecho, rompen el hielo y se abren a conocer y conocerse.
¡¿Qué me cuentan ustedes?! Hoy necesito sus comentarios también como parte del proceso creativo de la obra de teatro en la que estoy trabajando. Es muy probable que de algún modo el blog también allí esté presente. ¿Cómo fue que llegaron acá? ¿Qué los hizo entrar? ¡¿Qué post o tema los empujó a comentar?! ¿Con qué frecuencia nos leen? ¡¿Qué significa hoy este espacio para ustedes?!
*¿No es curiosa la traducción literal de este término?

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