Tendencias deco: 6 maneras de armar un comedor al aire libre
Quincho, galería o comedor a cielo abierto, podemos llamarlo de cualquier manera, llegó la temporada de sacar la mesa afuera y disfrutar del aire libre, te damos buenas ideas.
4 de enero de 2025
Ya sea en una terraza, un patio o un jardín, la idea es integrar con el exterior el espacio para comer. - Créditos: Gentileza Archivo LIVING/ Maia Croizet
Sol y calorcito invitan a comer al aire libre: una noche estrellada, un mediodía veraniego. Los ambientes que conectan el interior y el exterior de una casa o departamento se vuelven los espacios estrella para compartir un encuentro perfecto y las galerías o quinchos pasan a ser un sector codiciado.
Le pedimos a LIVING que nos lleve a recorrer distintas opciones de comedores al aire libre para ver casos reales y sacar buenas ideas de cómo lo resolvieron en cada caso. ¡Pasen y copien!
1. Conexión total
El quincho está a continuación de la cocina y comunicado con el patio. - Créditos: Gentileza Archivo LIVING/ Maia Croizet
En la casa de Juan Otero, todo está pensado al milímetro. Juan, ingeniero y diseñador de vehículos a medida, es un apasionado de las energías renovables.
El Estudio Mas Conceptual diseñó su casa, donde el quincho no está en la ubicación habitual. No está lejos de la casa ni es una parrilla en un extremo de la galería.
Para salir del quincho al patio, se diseñó una puerta levadiza plegable que protege la abertura y funciona como techo cuando llueve, sin ocupar espacio cuando está abierta.
Para salir del quincho al patio se diseñó una puerta levadiza plegable que protege la abertura y funciona como un techo cuando llueve, además de que no ocupa espacio cuando está abierta. - Créditos: Gentileza Archivo LIVING/ Maia Croizet
2. Luminosidad al 100%
Reutilizaron viejos durmientes de lapacho para hacer este juego de mesa y bancos. - Créditos: Gentileza Archivo LIVING/Daniel Karp
La arquitecta Estefanía Di Carlo, dueña de casa y autora de su proyecto, no quería una galería techada, pero sí un espacio para disfrutar comidas al aire libre.
Así que instalaron, junto a la piscina, una estructura metálica con un toldo provisorio, esperando que las enredaderas formen un techo verde.
3. Balcón ganado
Las paredes del balcón, transparentes, para estar en permanente contacto con el afuera y aumentar las posibilidades de uso, sobre todo adentro. - Créditos: Gentileza Archivo LIVING/ Santiago Ciuffo
Para Julieta Doellinger, el balcón es uno de sus lugares favoritos. Pasa muchas noches de verano allí y, además, le permite ampliar el comedor cuando abre de par en par las puertas ventana.
En su departamento de Ituzaingó, diseñado por la arquitecta Diorella Fortunati de Estudio Morton, hizo de este ambiente el espacio perfecto para ubicar el comedor.
4. De otra latitud
Banco de piedra, sillas pintadas, mantel con estampado pop, la infaltable guirnalda de luces y hortensias en flor: sencillez con mucha onda. - Créditos: Gentileza Archivo LIVING/ Pompi Gutnisky
Cala Zavaleta recuerda cómo su madre, la artista plástica y diseñadora Alicia Goñi, famosa por su tienda Cat Ballou, encontraba cosas únicas en remates y chatarreros y las restauraba. Tenía la habilidad de crear espacios acogedores en un instante.
En esta casa, exploró una estética inspirada en el sur de Francia y el Mediterráneo, creando un rincón lleno de color y recuerdos.
5. Ingenio en la terraza
Aprovechar al máximo cada metro fue la misión en este espacio reducido, con buenas soluciones se logró. - Créditos: Gentileza Archivo LIVING/ Federico Kulekdjian
En la terraza del arquitecto Federico Grizzo, de Grizzo Studio, se encuentra una solución bien pensada: un banco corrido de ladrillo se transforma en cantero en uno de sus extremos. En el otro, se amuraron dos mesas de chapa pequeñas, que pueden usarse para reuniones pequeñas o como soporte para una tabla que funcione como mesa grande, al estilo de caballetes.
6. El encanto de las pérgolas
Un balcón sin demasiada gracia se convierte en un espacio ideal para asaditos urbanos con una estructura metálica.
En la glorieta porteña semicircular, las trepadoras crecen en grandes macetones junto a cada varilla de hierro.
Se optimizó el espacio disponible para recibir más invitados colocando almohadones sobre un banco de obra. - Créditos: Gentileza Archivo LIVING/ Maia Croizet
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