Estas 4 acciones van a ayudarte a tener una relación sana

¿Querés mejorar tu relación o construir una con una base fuerte y sólida? Te contamos 4 acciones que podés llevar adelante para fortalecer tu vínculo.

por

Ayelén Di Leva

25 de enero de 2024

Con estas 4 acciones, vas a lograr construir una relación más sana. - Créditos: Getty

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El término “relación sana” está en boca de todos. En pos de no caer en un vínculo tóxico, que no construya, todos perseguidos ideales de pareja que, a veces, pueden convertirse en una gran presión.

Ahora, ¿sabemos a qué nos referimos cuando hablamos de “relación sana”? Por lo general, al pensar en este término, se nos viene a la mente una pareja perfecta, algo que, ya te adelantamos, no existe. Creemos que una pareja ideal es ese vínculo en el cual no hay debilidades, diferencias ni discusiones. Pero, al contrario de nuestros pensamientos, una relación sana es aquella en la que se presentan las debilidades, los obstáculos, las diferencias, pero en la que las dos partes tienen la capacidad, la voluntad y la habilidad de poder modificarlas.

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A veces, se logra a través de una comunicación asertiva, proponiendo y buscando evitar cualquier tipo de violencia psicológica, verbal, física o emocional, respetando las libertades, los límites y el espacio individual. Siempre compartiendo, porque elegimos compartir, no como una necesidad, sino como una elección. Y sobre todo sabiendo que las parejas perfectas no existen, que van a aparecer las discusiones, los desencuentros o las molestias, pero lo principal es la capacidad y la voluntad de querer cambiar y de poner en juego todas nuestras habilidades para lograr mejorar cualquier problemática.

De todas maneras, hay algunas cosas que podés hacer en el día a día para que tu vínculo sea fuerte y lo más sano posible. Anotá estos 4 puntos y chequeá si ya los estás llevando a cabo. Si no, es un buen momento para comenzar.

Generar nuevos contratos de pareja para sostener el amor. - Créditos: Getty

1
Convivir con las diferencias. Tratá de aceptar cuando la otra persona no tiene las mismas creencias, pensamientos o ideales y no intentes cambiarlo. Es muy común querer cambiar al otro porque esas cosas que nos gustaron al principio (¡y nos enamoraron!) ya no nos agradan, pero eso empieza a crear varios conflictos. Buscá evitarlo.
2
Fomentar la comunicación. Es muy importante hablar las cosas que nos molestan, llegar a acuerdos, ver de qué manera podemos intentar cambiar eso que no nos agrada tanto del otro. Es clave fomentar la comunicación en todos los aspectos de la vida, incluido el aspecto sexual. En una pareja, lo ideal es no tener restricciones con respecto a transmitir lo que sentimos, lo que pensamos y aquellas cosas que nos molestan también.
3
Amar desde la libertad. La libertad implica respetar los límites de la otra persona, sobre todo en cuanto a la privacidad, porque por más que seamos una pareja, somos dos individuos y nunca hay que perder esos espacios individuales. Por ejemplo, hay parejas que comparten las claves de los celulares y toman eso como un índice de confianza, pudiendo ingresar en la vida privada de la otra persona. Poner límites y decirle no a eso también es marcar la libertad individual de cada uno. Además, es necesario fomentar el respeto y la confianza entre ambos, así como poder elegir y decidir qué queremos, sin poner restricciones o controlar a la otra persona. Cuando tu pareja hace alguna salida o actividad sola, porque en ese espacio se siente libre y le hace bien, desde el otro lado debemos disfrutarlo por el otro, apoyarlo e incentivarlo. Debemos cuidar y respetar esos espacios individuales.
4
Compartir tiempo de calidad. A veces no contamos con mucho tiempo y nos esforzamos y nos juntamos igual, aunque no tenemos ganas. Cuidado en este punto, siempre hay que tener presente que es mejor “poco y bueno” que “mucho, forzado y malo”. Tal vez no pueden verse todos los días, pero que esos momentos sean de común acuerdo, con decisión y con muchas ganas. Lo importante es pasar juntos momentos que construyan y que sumen.
Trabajar en estos puntos puede ayudar a tu relación. ¿Te animás a ponerlos en práctica?