¿Cómo será la Generación Beta?: 2025 arranca con nativos digitales que llegan con la IA como ADN

Abran paso, que llegaron los beta. Según Mark McCrindle, investigador social que bautizó esta nueva generación, serán los primeros en experimentar entornos virtuales inmersivos, la transportación automática a gran escala (sin que medien humanos), tecnologías de monitoreo de salud portátiles, asistentes robóticos en oficinas, hogares inteligentes, chat GPT, bots, Alexa: la tecnología que sorprendió al mundo en los últimos años, para ellos será intuitiva, orgánica. 

Desde su educación y formación hasta su ocio y entretenimiento, estarán signados por algoritmos y una sobreexposición digital que se infiltrará íntegramente en sus formas de consumir y aprender. La llegada masiva de la inteligencia artificial a la sociedad pareciera ser un nuevo ingrediente que se instala en conversaciones cotidianas de bares y cafés, en el universo laboral y en congresos e instituciones. 

Las preguntas que aún no tienen respuesta son varias. El miedo a perder la singularidad, la subjetividad, la espontaneidad, la inteligencia humana, es parte de los grandes interrogantes. A escalas más institucionales, organizaciones como la UNESCO trabajan en los desafíos educativos de “preservar la autonomía en un mundo automatizado”. Pero los bebés que nacieron hoy, y los que vendrán, llegan con la IA en su ADN. ¿Podrán distinguir entre lo virtual y lo real y encontrar un equilibrio? ¿Serán más conscientes aún de lo bueno y lo malo de la sobreexposición digital? 

Si bien todavía no hay certezas de cómo será el impacto de esta generación en los próximos años, se prevé que los beta estudiarán, se formarán y trabajarán en áreas y profesiones que aún se desconocen. De algún modo, representan una promesa: su capacidad de ser creativos, flexibles y adaptados a un mundo tan cambiante puede hacer que traigan soluciones impensadas hoy a problemáticas globales y ambientales. Y también resultan un desafío para las generaciones actuales más cercanas: los millennials y centennials.

¿Cómo educarlos, cómo aprender de ellos y guiarlos? Las predicciones de consultoras, sociólogos y científicos coinciden en que esta generación será autodidacta como ninguna. Ahora bien, ese aprendizaje, ¿cuán automatizado estará?, ¿cuánta capacidad de discernir o tener una propia interpretación de lo que se aprende? 

Los educadores ya trabajan en concientizar sobre la importancia de que la tecnología complemente, expanda y no reemplace las dimensiones humanas. 

También se prevé que, al nacer expuestos a conversaciones sobre cambio climático, igualdad de género y derechos humanos, serán más conscientes de estas temáticas desde muy pequeños. Hay quienes predicen que serán quienes mayor conciencia tengan de resguardarse del exceso de digitalización. Crecerán en un mundo plagado de deepfakes: videos, imágenes, audios generados por inteligencia artificial, que ya hoy son capaces de engañar a personas y hasta algoritmos. Uno de sus grandes desafíos será equilibrar los vínculos tecnológicos con las habilidades sociales y construir sus propias identidades, en busca de un equilibrio entre la hiperconectividad y la personalidad. 

Los padres de estas generaciones son, en su mayoría, millennials y centennials. Su mayor responsabilidad será encontrar la forma de proteger la seguridad digital de sus hijos y que el uso de la inteligencia artificial juegue a su favor y no en su contra en la crianza y el aprendizaje. La ética y la regulación serán temas clave a explorar para proteger y preservar su identidad, su toma de decisiones, para que no esté únicamente guiada por algoritmos.

Más que nunca, deberán incentivar que desarrollen su sentido crítico, su singularidad y, sobre todo, su personalidad. Estimular también como adultos el “no hacer nada”. Ya las generaciones contemporáneas no encuentran la posibilidad de tener tiempo libre, de contemplación o divague. Promover la concentración y el pensamiento profundo pareciera ser hoy otra herramienta clave para criar. 

 

Bill Gates reflexionó sobre cómo se desarrollarán las mentes de estas nuevas generaciones, parafraseando a Jonathan Hait en su libro La generación ansiosa, y planteó dos tipos de crisis diferentes que los padres de hoy deben atravesar: desprotegerlos al darles acceso a un uso indiscriminado e incontrolable de dispositivos y redes y, al mismo tiempo, sobreprotegerlos de cualquier tipo de riesgo en el mundo real.

Esto trae como consecuencia chicos que sufren por su relación adictiva con la tecnología y por sus dificultades para afrontar los retos de la vida cotidiana. “Nuestra atención es como un músculo, y la naturaleza adictiva de las redes sociales hace increíblemente difícil desarrollarla”, sostuvo. 

-Silents | 1928-1945

Alcanzaron su adultez entre la Gran Depresión de Estados Unidos y tiempos de entreguerras. 

-Baby boomers | 1946-1964

Después de la Segunda Guerra Mundial. Abocados al trabajo. Priorizan la estabilidad

-Generación x | 1965-1981

Presenciaron grandes avances tecnológicos. Buscan equilibrar su trabajo con su vida familiar y social. 

-Millennials | 1982-1994

Primeros en experimentar el avance masivo de Internet y el mundo digital. Idealistas, creativos, emprendedores y multitasking. 

-Centennials | 1995-2009

Crecieron presenciando e incorporando las redes sociales y nuevas tecnologías digitales. Autodidactas, creativos y sobreinformados. 

-Generación alpha | 2010-2024

Primera generación nacida íntegramente en el siglo XXI. Criados en familias diversas, no tradicionales. El entorno digital está incorporado naturalmente a su vida. 

-Generación beta | 2025-2039

Aprenderán a través de las herramientas digitales. Tendrán mayor conciencia social y ambiental. Su sociabilidad está guiada por la interacción digital.

Toda generación está signada y guiada por las tecnologías del momento. No solo las digitales: desde la máquina a vapor hasta el fuego, la imprenta, el cine, la tele. Hoy, la tecnología digital impacta en la forma de ser y de estar. La instantaneidad, la poca distancia entre el deseo y su concreción, la multitarea, el entretenimiento constante, la sobreinformación..., todo eso impacta distinto en las generaciones contemporáneas.

Estas son las principales diferencias: 

• Nacidos entre 1981 y 1996
• Los primeros en experimentar el avance masivo de Internet. La transición.
• Tuvieron educación presencial, fueron a escuelas con aulas y solo tenían clases de computación o algunas instancias de usar computadora.
• Sus relaciones sociales comenzaron de forma totalmente analógica, y de más grandes vieron la llegada de las redes sociales como otra forma de relacionarse.
• Tomaron conciencia de las problemáticas globales a través de las redes sociales y movilizaciones sobre cambio climático, derechos igualitarios y diversidad alrededor del mundo.
• Crecieron con menos acceso a salud mental que las generaciones más jóvenes y son disruptivos, idealistas y cuestionan lo establecido. 

• Nacidos entre 2025 y 2039
• Los primeros en crecer en un entorno totalmente digitalizado, con la inteligencia artificial incorporada masivamente en la sociedad.
• Tendrán una educación híbrida (digital y física), con aulas virtuales e inmersivas, aplicaciones de aprendizaje, clases y plataformas virtuales. 
• Las redes sociales y espacios virtuales, el metaverso, son sus espacios de relación social habitual, orgánica. 
• Desde muy chicos serán conscientes de problemáticas globales,cambio climático, la diversidad, la búsqueda de la sustentabilidad y la igualdad. 
• Crecerán rodeados de dispositivos que atrapen su atención. Se desconocen los efectos de la hiperconexión en su desarrollo emocional.