Procasturbación: según un estudio, tener sexo en horario laboral aumentaría la productividad

Postergar el trabajo para masturbarse o tener relaciones sexuales es conocido como procasturbación, parafraseando la noción de procastinar, es decir, retrasar actividades o situaciones que deben atenderse, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes.

“Un estudio realizado por la Academia Internacional de Sexología Médica analizó este asunto en muchos países y vio que las parejas que convivían juntas durante el confinamiento y que tenían buena relación aumentaron la frecuencia y la satisfacción sexual. Una de las carencias que detectaban antes de la pandemia y del confinamiento es que no tenían tiempo para tener espacio juntos de intimidad”, especificaba.

Por otro lado, un estudio de Yellow Octopus, una plataforma australiana de ventas en línea, reveló que durante la pandemia también ganó un lugar protagonista la masturbación durante las horas de trabajo.

La investigación se llevó a cabo a través de una encuesta a 1000 empleados que trabajan en Canadá, Estados Unidos y Reino Unido y demostró que el 17 % de las mujeres y el 35 % de los hombres contaron que se masturbaron trabajando desde casa.

El 26% de los hombres y el 19% de las mujeres encuestadas contó haber tenido sexo durante el horario laboral cuando cumplía labores desde su casa. La mayor parte de ellos (27,7%) estaba dentro de la franja de los 18 a 24 años, seguidos por personas de la franja que va de los 25 a los 34 años (24,2%)”.

De este modo, los profesionales en sexualidad Anel Martínez y Andrés Suro aseguraron en distintos medios que, la encuesta realizada es certera, ya que el teletrabajo mejoró la vida sexual de algunas parejas. Para ellos, no solo no baja la productividad de quienes lo practican, sino al revés.

“El sexo durante el teletrabajo tiene consecuencias muy positivas, ya que aumenta la calidad de vida y el fortalecimiento de las relaciones personales, lo que repercute en una mayor productividad laboral”, puntualizaron.

El estudio concluyó que la sensación más repetida de los participantes fue la relajación. Y, al mismo tiempo, indicaron sentirse “renovados y más productivos” después de estar con su pareja o haberse masturbado".