Lo nuevo de Mondongo en Malba: no te pierdas Manifestación, en honor a Berni

En la sala del subsuelo del Malba las dos obras se enfrentan. “Manifestación” de Mondongo está en una caja-marco, un poco más grande que la arpillera que es el lienzo en la “Manifestación” de Berni, pero con la misma proporción. Es un altorrelieve en plastilina donde las figuras se superponen, al igual que en la pintura del maestro rosarino. 

En la obra de 1934 la manifestación sucede en una refinería de Rosario. En esta, se da en Plaza de Mayo. Pero algo no encaja: se ve el Cabildo y a su izquierda la Catedral. El orden está invertido, como si lo que estuviéramos viendo no fuera la realidad en directo, sino un reflejo.

Se congregan allí defensores de diferentes causas: un pañuelo verde, una bandera Argentina, hay jóvenes, niños y ancianos. Hay gente diversa manifestándose. Todos tienen un denominador común: pertenecen o pertenecieron al entorno de los artistas. Juliana y Manuel eligieron a personas que conocen, que admiran, que quisieron. Y explican que es su manera de conectar espiritual y emocionalmente con el retrato que conciben.

Se distingue atrás de todo a Marta Minujin, más adelante a Sergio Bizzio. También vemos a Fogwill (a quien ya había retratado Mondongo usando hilos), a Agustina Carri, a Sergio De Loof. Vemos a la abuela de Juliana Lafitte (que ya no vive) con sus ojos cerrados y a Diego de Aduriz enmascarado.

Los trazos son en plastilina amasada, derretida, pintada. Es un recurso que Mondongo utiliza desde hace tiempo (y tras explorar con varios materiales) como un sistema propio que va encontrando nuevas expresiones.

El cuadro tiene secretos. Además de la identidad de cada una de las personas que eligieron para situar en esta movilización, hay algunos “huevos de pascua” (así suelen llamarse a esos elementos escondidos) como por ejemplo uno que puede descubrirse haciendo foco en las pupilas del artista Hoco Uoc quien aparece en primer plano con una gorra de la bandera argentina y en sus ojos brillan pequeñas caritas “Smile”.

Para llegar a la sala hay que pasar por una instalación de sitio específico creada también por Mondongo. Se trata de un par de casas humildes, de construcción precaria con techo de chapa. Una de ellas es la vivienda de un pintor. Podría ser la de quien crea sus obras con los pies en el barrio. También es la misma que se representa en una tela colgada de la pared y evoca a Sin pan y sin trabajo, creada por Ernesto de la Cárcova en 1894.   

Manifestación, homenaje a Antonio Berni ya tiene dueño. Al día siguiente de descubierta la obra en Malba, Eduardo Costantini la compró para su colección personal.

Este diálogo de obras se expande y hablan también otros artistas a través de un texto coral que forma parte del catálogo con las obras expuestas, un registro de la instalación de sitio específico y escritos de doce autores bien disímiles sobre el concepto de “manifestación”: Albertina Carri, Fernando García, Francisco Garamona, Carmen González Taboas, Sergio Bizzio, Gastón Cammarata, Margarita Martínez, Laura Isola, Fernando Martín Peña, Ariana Reines, Marie Gouiric y César González. 

Con esta obra, Juliana y Manuel rinden tributo a Antonio Berni: “es un artista central en nuestra producción, porque de alguna manera nos abrió el camino para pintar el mundo con materiales diversos y cargados de sentido. Entendemos que los temas y las formas que componen este retrato múltiple que es Manifestación se proyectan noventa años hasta nuestra actualidad y continúan teniendo la capacidad de interpelarnos de una manera profunda y bella”, dicen.