Relaciones: con este test descubrí si con tu pareja son amigos

¿Cuánto tiempo de calidad se dedican a diario? Entendiendo que la intensidad del trabajo, compromisos, reuniones, los chicos, la actividad física, entre otras cuestiones, pueden ir consumiendo nuestro tiempo y energía y, en el momento que llegamos a la casa, estamos en cero. Sin grandes esfuerzos, quizás 30 minutos diarios serán ideales para charlar, sin celular mediante, sobre ustedes, intercambiando ideas, revisando cómo les fue. La sobremesa o cuando están cocinando pueden aprovecharlos para compartir un ratito los dos.

Siguiendo la misma lógica de que a diario el reloj se vuelve inclemente frente a todas las actividades que tenemos, entonces, muchas veces la rutina es como un drenaje que nos succiona. ¿Qué tal buscar la satisfacción mutua con actividades que les den placer a ambos? Pensá que son compañeros de diversión: ir al cine a ver una peli que les guste a ambos; practicar una actividad física o deporte que los satisfaga; ir a un recital; salir a cenar y tomar un rico cocktail, entre otros.

¿Recordás cuáles eran los programas que más disfrutaban hacer cuando empezaron a salir? Quizás la convivencia y los chicos, si los hay, hicieron que eso quedara en un pasado lejano. Reconectáte con tu pareja reviviendo estas actividades.

La idea es que, una vez que empieces, ambos se motiven a seguir practicando estas actividades que disfrutaban de hacer en compañía.

Esto puede ser más desafiante, pero merece que lo intentes. Mientras que a uno le gusta el paddle, a otro jugar al tenis, a uno el crossfit, al otro la gimnasia funcional… encontrar un hobby que les guste a los dos es un reto. La cuestión es prueba y error.

Probá con la culinaria, ir a la cancha juntos (si comparten club de fútbol), leer el mismo libro y comentarlo, armar un rompecabezas, inclusive algo tan simple como ver una serie. El lazo de compañerismo se fortalecerá en el momento que encuentren ese punto de conexión común.

Por último, un pilar indiscutido de cualquier relación de amistad -y de pareja- es la confianza y en cómo se apoya el uno sobre el otro en distintos momentos de la vida.  

Escuchar al otro activamente, ser empático, aconsejar sin señalar, actuando de la misma manera que lo harías con una amiga es una forma de fortalecer la camaradería con tu pareja.