Ser amigo de tu ex, ¿es posible?
Conversamos con una experta sobre las variables decisivas que podrían posibilitar el vínculo de amistad con un ex y el rol que ocupa el duelo de la relación sexoafectiva.
3 de junio de 2024
Para que la amistad con un ex funcione, se aconseja no buscar sostener esa relación como un “aliviador de la ruptura”. - Créditos: Getty Images
Cuando la relación termina bien con un ex, y todavía hay afecto y ganas de sostener de alguna manera la presencia de esa persona que durante un tiempo fue parte de tu vida, la pregunta que aparece es ¿se puede crear una amistad, luego de haber sido pareja?
Como suele suceder en este tipo de preguntas, las respuestas son de lo más variadas y dependen de cada vinculo. Lo que sí podemos encontrar son algunos denominadores comunes que demuestran cuando el terreno es fértil para que una amistad luego de una ruptura sea posible, y cuando las probabilidades de éxito son muy bajas.
Al respecto conversamos con la psicoterapeuta Valeria Roca, quien comienza considerando que la posibilidad de mantener una relación con un ex como amigo/a radicará en la madurez emocional y en las expectativas que ambos tengan de esa nueva formad de relacionarse.
“Qué es lo que esperas de una amistad con tu ex? ¿cuáles son los motivos de esa necesidad?”, abre pregunta para comprender las causas que motivan a tener amistad con nuestra ex pareja.
La madurez emocional es fundamental para dialogar sobre lo que cada uno espera de ese nuevo vínculo. - Créditos: Getty Images
“Muchos creen que es la solución para lograr la continuidad del vínculo, inclusive a veces se está convencida/o de que en algún momento al estar cerca puede hacer que el otro cambie de opinión y suceda la reconciliación. Para otros, en cambio, es la forma saludable de mantener una nueva forma de relacionarse: a través de una amistad”, detalla.
En este sentido, nos cuenta que es habitual la confusión que surge de la necesidad de tener una buena relación con un ex –en especial cuando hay hijos en común- con la necesidad de mantener una amistad. “Tener una muy buena relación no nos implica tener una amistad. Podemos tener una relación sana, amigable pero no implica que sea la persona que vaya a confiarle mis intimidades”, puntualiza.
Claves para lograr una amistad con tu ex
La causa de la ruptura y si fue de común acuerdo: Cuando la relación se termina por decisión de una sola parte, como dice Vale, existe “inequidad emocional”, lo cual hace que sea más compleja la posibilidad de construir una amistad. Pueden aparecer sentimientos contrapuestos y una de las partes puede verse involucrada en emociones como enojo, ira, decepción. En cambio, cuando ambas partes deciden de común acuerdo finalizar el vínculo de pareja es más probable que ambos puedan mantener una relación con el otro de manera saludable, pudiendo catalogarse como “amigos” o quizás solo como una buena relación.
El momento en que alguna de las partes comienza a tener una relación con otra persona: Si uno de los dos se siente herido o decepcionado, probablemente la amistad enmascaraba la necesidad de mantener ese vínculo con la otra persona, para no “quitarla” de nuestra vida.
Para construir una amistad luego de una ruptura es fundamental la madurez emocional: ¿Qué implica? Ser honestos y claros con lo que sentimos y deseamos, y exponer abiertamente lo que esperamos, aunque sea doloroso. Como dice Valeria, ambas partes tienen que ser creadoras de las reglas del juego. Para ello es imprescindible el dialogo abierto, y entender para qué se busca continuar el vínculo, ahora como amigos. Puede ser porque la presencia de hijos en común, que son parte de un mismo grupo de amigos, porque comparten un trabajo, entre otros tantos ejemplos.
Una gran prueba de amistad: El momento en que alguna de las partes comienza a tener una relación con otra persona - Créditos: Getty Images
Hacer el duelo de la relación antes de pensar en la amistad
Para que nazca algo nuevo tiene que morir lo viejo: nos guste o no, la regla es siempre la misma. Y para integrar el duelo a la amistad es necesario hacer un recorrido interno. “Si no podemos atravesar el fin de una relación, no podemos dar inicio a un nuevo vinculo”. Y recuerda las etapas del duelo de las que habla la Elisabeth Kübler-Ross, psiquiatra y escritora, quién basó su investigación en el proceso de duelo y muerte.
En ese sentido, Valeria, que retoma las palabras de la psiquiatra, dice que el duelo es algo muy saludable ante la muerte de una relación, interpretada como un concepto de finalización, en el que se atraviesa distintas fases como parte de las etapas que colaboran a dar cierre a un vínculo antes de iniciar uno nuevo.
Las etapas no tienen que ser necesariamente lineales y son las siguientes:
Fase de Negación y Aislamiento: Se niega la realidad sin notar que la relación llego a su fin, y se sigue como si nada hubiera pasado. Es una forma de protegernos del dolor.
Fase de ira: Una de las personas tiende a enojarse con a que decidió tomar la decisión. Inclusive cuando uno mismo la toma muchas veces se enoja no por la ruptura sino la frustración y el dolor que le ocasiona, aunque de quien toma la iniciativa.
Fase de depresión: Es la etapa de dolor, en donde sentimos que efectivamente la relación se terminó y convivimos con la angustia que conlleva. Me gusta denominarlo la fase de “toma de conciencia”.
Fase de aceptación: Comenzamos a visualizar un nuevo futuro.
Por último, Valeria sintetiza que, para que un vínculo sea saludable y nos potencie con un ex, tenga o no el título de "amistad", deberíamos considerar algunos aspectos:
- Ambas partes deben tener claros los sentimientos con respecto al otro.
- Si alguno mínimamente tiene una intención de otras características cuando lo ve, como ganas de abrazarlo/a, revivir momentos de intimidad, sentir que no soportaría verlo/a con otro/a. Claramente es inviable un vinculo que sea potenciador.
- No utilizar los encuentros para volver a conversaciones o charlas del pasado.
- No mantener la relación como un “aliviador de la ruptura”.
- Sentir que pudimos desarrollar el duelo.
- Sentir que el vinculo con otro nos resulta favorable, y no una mascara que demuestra que todo esta bien y cuando llegamos a casa quedamos destrozados emocionalmente.
- Identificar si el vinculo que quiero mantener es con la persona o con el hombre/mujer que fue dentro de la pareja.