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Ecstatic dance: en qué consiste esta disciplina que invita a bailar como una forma de liberar el cuerpo y las emociones

Ecstatic dance es una disciplina que invita a bailar como una forma de liberar el cuerpo y las emociones. Te contamos cómo soltar el control y empezar a fluir.


Ecstatic dance: bailar hasta que los prejuicios se vayan.

Ecstatic dance: bailar hasta que los prejuicios se vayan. - Créditos: Gentileza Sofi Lofi



Seguramente viste que en Instagram se hizo viral el desafío de subir una foto con “la canción de los 2000” que sonaría en tu mp3. Si yo tuviese que elegir una, sería “Just Dance”, de Lady Gaga. Lo que me gusta de ese tema es que automáticamente me da ganas de bailarlo donde sea que lo escuche. Es más, si llega a sonar mientras estoy limpiando la casa, la escoba se convierte en el mejor compañero de baile. En ese momento y lugar, me siento libre para ser yo misma sin un solo gramo de vergüenza. 

Siempre pensé que el living era la única pista de baile que admitía este tipo de espectáculo, pero encontré que hay otros espacios donde puedo moverme como quiero sin que nadie me juzgue. Entre las disciplinas que conocí durante mi búsqueda, me llamaron la atención las sesiones de ecstatic dance, una práctica de danza libre en la que solo hay cinco pautas: se baila descalza, sin hablar, sin drogas, sin alcohol y no existe una forma correcta o incorrecta de moverte. Sin conocer mucho más que esto, decidí mandarme de una y ver qué pasaba.

Una danza ritual

La DJ Sofi Lofi da sesiones de ecstatic dance cada quince días en Monopol Lab, un espacio de experimentación artística en Buenos Aires. La invitación dice que vaya con ropa cómoda, un mat y agua. Eso hago. Cuando llego, me encuentro con un lugar oscuro pero agradable. Luces azules, velas, plantas, un video proyectado en la pared. En el centro del salón hay varias personas acostadas en el piso, elongando. Con la filosofía de “a donde fueres, haz lo que vieres”, los imito sin saber bien por qué.

Por suerte, el interrogante no dura mucho. Desde la consola, Sofi nos invita a caminar por el lugar y a buscar un espacio donde estemos cómodos. La verdad, no necesito dar muchas vueltas para darme cuenta de que quiero ir al fondo del salón. No tengo tiempo de pensar en si elegí bien o mal porque por altoparlante empieza a sonar una melodía que me recuerda al folclore jujeño mezclado con ritmos techno. “Recuerden que acá no existe danzar bien o mal”, dice Sofi, y empieza la fiesta. 

La DJ Sofi Lofi da sesiones de ecstatic dance cada quince días en Monopol Lab.

La DJ Sofi Lofi da sesiones de ecstatic dance cada quince días en Monopol Lab. - Créditos: Gentileza Sofi Lofi

Soltar el control y empezar a fluir

Los primeros minutos me quedo quieta sin estar muy segura de qué hacer. “¿Cómo se baila este tipo de música?”, resuena en mi mente. Si me ponés una de Bad Bunny, la tengo clara, acá estoy fuera de mi elemento. Miro qué es lo que hacen los demás para orientarme y noto que cada uno está en su flash. Algunos danzan acostados en el piso y otros se desplazan por toda la pista. Están los que solo levantan los pies y los que parecen bailarines profesionales. Ahí me hace el clic.

No es tan distinto a cuando bailo en el living de mi casa, el punto es escuchar la música y dejar que el cuerpo responda. A diferencia de otras danzas, en la ecstatic no hay una técnica “correcta” para moverte. La magia sucede cuando bailás libremente. Es acallar los pensamientos negativos un ratito para disfrutar de algo tan simple y hermoso como es moverte.

 

Empiezo a soltarme. Me animo a ocupar más espacio y me entrego a la música. No voy a mentirte, la sensación de que soy una ridícula no se va del todo, y menos cuando veo que el que está al lado mío parece salido del elenco estable del Colón. Sin embargo, apenas noto que me estoy poniendo perfeccionista, cierro los ojos y me recuerdo que bailo para mí. 

La música cambia, se pone por momentos más pop, por otros más rockera, y siento que ya no tengo ganas de estar escondida en el fondo. “Los que no se animaron a pasar al centro, los invito a que lo hagan, acá todos somos protagonistas”, dice Sofi como si me hubiese leído la mente. OK, es el empujoncito que necesitaba. En el medio del salón, salto, me muevo y termino bailando a la par con otra chica. Nos sonreímos y me siento feliz de estar compartiendo ese momento con una desconocida.

La noche sigue así. Sofi nos lleva de viaje por distintos ritmos y nos acompaña con palabras. La música está bien arriba, pero mis piernas no pueden seguirle el ritmo. “Si estás cansado, hacé movimientos más chiquitos, pero no dejes de bailar”, otra vez Sofi me responde como si tuviésemos telepatía.  

Ecstatic dance: bailar hasta que los prejuicios se vayan.

Ecstatic dance: bailar hasta que los prejuicios se vayan. - Créditos: Gentileza Sofi Lofi

El momento del final

Después de haber pasado por unas cumbias, la playlist se ralentiza y los movimientos eufóricos de a poquito se vuelven más calmos. Sofi agarra de nuevo el micrófono, pero esta vez nos sorprende a todos con una melodía que tiene algo de mantra y canción de cuna. Es un lindo cambio pasar de la música techno a la performance en vivo. Cerquita de mí, uno de los participantes se emociona y se le escapan algunas lágrimas. 

Para cuando la canción termina, el escenario cambió. En el medio de lo que era una pista de baile hay una alfombra y un par de velas, ahí está sentado un hombre con un handpan (una especie de tambor metálico con un sonido muy dulce). Todos nos ubicamos a su alrededor mientras empieza a tocar. Hay quienes siguen bailando, otros se sientan en pose de meditación, yo me desplomo sobre el mat y disfruto de la música mientras recupero el aliento. En uno de los temas, nos anima a cantar a coro. Al abrir la boca, caigo en la cuenta de que no usé la voz durante dos horas. Los primeros sonidos que salen de mi garganta se sienten extraños, como si no fuese yo la que los hace. 

 

La ecstatic termina con una ronda gigante en la cual nos agradecemos por haber participado. Por mi parte, me queda la sensación de que pasé por una montaña rusa emocional. Cuando logré dejar atrás el pudor, primero se sintió como un juego y después, como un trance en el cual la cabeza estaba en segundo plano. Obviamente, cada tanto los pensamientos intrusivos y el cansancio me sacaban de ese estado, pero cuando esto pasaba, intentaba reconectarme con la música.

Creo que parte del encanto de estas sesiones –y una de las grandes diferencias de ir a bailar a un boliche– es el sentimiento de comunidad implícito que se genera. Cada uno está solo con su danza, pero hay algo de compartir el espacio que genera una sensación de intimidad con el otro. La experiencia está buenísima si vas con la mente abierta y te permitís explorar otra forma de moverte.

Ecstatic dance: bailar hasta que los prejuicios se vayan.

Ecstatic dance: bailar hasta que los prejuicios se vayan. - Créditos: Gentileza Sofi Lofi

Buscar la armonía con el baile

La ecstatic dance como práctica nació hace veinte años en Hawái, pero su espíritu nos recuerda a otras danzas más antiguas. Bailar en estado de –valga la redundancia– éxtasis tiene un efecto terapéutico. “Llegás de una manera y te vas de otra”, nos dice Sofi Lofi. Ella resalta que el problema está en que la cabeza suele ser la protagonista; de esta forma, perdemos armonía con el cuerpo y la mente nos juega en contra.

Sin embargo, al bailar libremente, nos conectamos con nuestro cuerpo y encontramos el equilibrio. Los pensamientos oscuros se van y aparecen otros más luminosos. Según Sofi, si sostenemos esta práctica en el tiempo, podemos llevar este estado de armonía a nuestra vida diaria.

Hacks para disfrutar sl 100% de una sesión

  • Llevá ropa cómoda: que te permita moverte, y una botellita con agua.

  • Si te da un poco de vergüenza: te recomiendo ir sola, así importa menos la mirada de los demás.

  • Si te animás, probá conectarte con otros participantes: a través de la mirada, el movimiento compartido o simplemente una sonrisa. 

  • Bailá sin prejuicios: y si la cabeza sigue pensando mucho, probá cerrar los ojos y enfocarte solo en tu cuerpo.

Dónde y cuándo hacerlo: agenda de las próximas fechas

Las próximas fechas de Ecstatic Dance en Buenos Aires son: domingo 26/5 a las 19:30hs en @monopol.lab (Darwin, 1351, Palermo). Y en junio, la primera fecha es el martes 4/6 a las 19 en @nicetoclub (Niceto Vega 5510). 

Más info: @ecstaticdancebuenosaires.

Experta consultada: Sofi Lofi, DJ y referente de ecstatic dance en Argentina. @ecstaticdancebuenosaires.

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