El yoga: los beneficios para la fertilidad
La médica, especialista en tocoginecología y medicina reproductiva Julieta Quaglia Martínez explica por qué el yoga genera múltiples beneficios para la fertilidad.
31 de julio de 2024
Practicar yoga puede ayudarnos en la fertilidad. - Créditos: Prensa
Solemos hablar de los beneficios del yoga (del sánscrito yoga 'unión', योग en devanagari), una disciplina tradicional espiritual, física y mental que conecta tanto el cuerpo como la mente a través de la consciencia en las respiraciones y el movimiento, lo que genera un estado de serenidad y equilibrio beneficiando a quienes lo practican en su salud física-psíquica y emocional.
La médica, especialista en tocoginecología y medicina reproductiva Julieta Quaglia Martínez se enfocó en el yoga y su particular beneficio para la fertilidad. Señala que toda persona que comienza un tratamiento de fertilidad, independientemente del motivo y del sexo, se encuentra ante una situación de vulnerabilidad y probablemente ha transitado emociones de angustia e incertidumbre al introducirse en el mundo de la medicina reproductiva.
"Es clave, como profesionales de salud reproductiva, poder empatizar con estas emociones y priorizar su bienestar físico y emocional para emprender el camino con calma", dice. Y suma: "La práctica del yoga es una herramienta fundamental para los pacientes ya que puede ayudarlos en el comienzo y el recorrido del tratamiento de fertilidad".
Según detalla, los beneficios del yoga son importantes ya que físicamente contribuye a mantener un estado físico saludable, con actividades que involucran el propio peso y equilibrio. "Aporta serenidad y es un momento de pausa mental que logra un vínculo armonioso entre el cuerpo y la mente. Esa sensación de bienestares un recurso sumamente importantes para bajar el nivel de estrés y el impacto que este enemigo silente del ser humano tiene sobre cada una de nuestras células", suma.
Beneficios del yoga en la fertilidad
Hacer yoga durante el embarazo es bueno para el feto y el bienestar integral de la mujer. - Créditos: Getty
Mejora la circulación sanguínea, lo que favorece la llegada de sangre a la pelvis, periné y genitales.
Favorece el drenaje linfático, algo que es importante en el sistema inmunológico.
En el sistema endócrino, equilibra la regulación hormonal y favorece su correcto funcionamiento y pulsatilidad.
Mejora la digestión, el flujo sanguíneo al intestino y los malestares intestinales y gástricos.
Colabora en la reducción de estrés, sensación de calma mental y paz.
Aporta flexibilidad tanto física como mental.
Produce la liberación de endorfinas y serotoninas, lo que genera sensación de alegría y bienestar.
"Una vez logrado el embarazo, todos estos beneficios tienen un impacto favorable en el feto, por tanto, se recomienda continuar esta práctica, teniendo en cuenta las posturas recomendadas según cada trimestre, pero de manera continua durante todo el embarazo", recomienda la experta. "El yoga genera beneficios físicos, flexibilidad, ayuda a tomar consciencia de la importancia del suelo pélvico y cuidarlo durante la gestación y en el puerperio y genera mejor flujo sanguíneo y beneficios para el bebé al estar en armonía".
Así es que esta práctica, que tiene más de 5000 años y que demostró ser una herramienta positiva para la salud de todas las personas a cualquier edad, también permite mantener la mente en calma y una actitud positiva, lo cual genera que el cuerpo se encuentre en mayor armonía y, en un tratamiento de reproducción asistida, puede ser una gran aliada.
Experta consultada: Julieta Quaglia Martínez, médica, especialista en tocoginecología y medicina reproductiva del equipo de CEGYR, Medicina y Genética Reproductiva (MN 178758)
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